La Eurocámara dio luz verde al acuerdo de comercio y cooperación entre la Unión Europea (UE) y el Reino Unido por 660 votos a favor, 5 en contra y 32 abstenciones. El nuevo esquema de relaciones entre Gran Bretaña y los 27 fue pactado en diciembre de 2020 y entró en vigor de manera provisional el 1 de enero de este año. Tras los cinco años de labor diplomática y legislativa que siguieron al referéndum de 2016, el acuerdo está listo para entrar en vigor de manera definitiva.
La sesión del día de ayer se dedicó al debate previo a la votación. Una extensa lista de oradores tomó cuatro horas y media para presentar argumentos a favor y en contra del acuerdo. Michel Barnier, el negociador por parte de Bruselas, recibió una calurosa despedida tras meses de arduo trabajo.
Sin embargo, el voto favorable no ignora que los eurodiputados consideran el resultado del referéndum británico un error de dimensiones históricas. De hecho, el Parlamento Europeo dejó asentada dicha opinión en una resolución adjunta a la del voto sobre el acuerdo. Además, Bruselas mantiene una desconfianza prudente hacia el Gobierno de Boris Johnson particularmente respecto al protocolo sobre Irlanda del Norte.
Funcionarios a uno y otro lado del Canal de la Mancha recibieron con beneplácito el resultado de la votación. El primer ministro Johnson y David Frost, el negociador británico, celebraron haber llegado al final de un largo camino de negociación. A su vez, expresaron su voluntad de continuar trabajando junto a la UE con la mirada puesta en el futuro de la relación bilateral.
Por su parte, Ursula von der Leyen, que preside la Comisión Europea, sostuvo que el tratado de comercio y cooperación constituye el pilar fundamental de la asociación entre Londres y Bruselas. No obstante, remarcó que en adelante será esencial la implementación fiel del acuerdo. El presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, también celebró el hito que da inicio a una nueva era en las relaciones bilaterales.