El régimen de Daniel Ortega había bloqueado la participación de Chamorro en las elecciones previstas para noviembre por medio de una acusación de lavado de dinero. Un día después, se conoció el arresto domiciliario de la principal candidata de la oposición nicaragüense. Según las encuestas, es la precandidata presidencial con más apoyos entre la población.
El Gobierno sandinista logró un procesamiento acelerado por parte de la Justicia para Chamorro, que es hija de la exmandataria Violeta Barrios de Chamorro, quien gobernó el país centroamericano entre 1990 y 1997. El 1 de junio el Ministerio Público presentó la solicitud de detención como parte del escrito de acusación. Al día siguiente, la jueza Karen Chavarría morales dictó la orden de allanamiento y detención contra la política opositora.
La acusación de lavado de dinero se asocia a las funciones que Chamorro desempeñó en la Fundación Violeta Barrios. La organización no gubernamental abogaba por la defensa y promoción de la libertad de prensa. Sin embargo, en febrero de este año debió poner fin a sus operaciones para evitar ser sometida a la Ley de Agentes Extranjeros promulgada por Ortega.
La inhabilitación electoral y posterior detención de Cristina Chamorro tuvieron lugar horas después de que se inscribiera en las elecciones internas del partido Ciudadanos por la Libertad. La oposición cuenta con un único lugar en la boleta electoral. Habiendo gobernado entre 1979 y 1990, y luego desde 2007 en adelante, el líder del Frente Sandinista, Daniel Ortega, busca asegurarse su tercera reelección consecutiva en unos comicios que carecen de legitimidad.