Los primeros ministros de Polonia, República Checa y Eslovenia viajaron a la capital ucraniana para reunirse con Volodimir Zelensky. El presidente ucraniano agradeció el gesto y el apoyo ofrecido a pesar de que la Comisión Europea ha tomado distancia de la iniciativa de los mandatarios.
Tanto Morawiecki como Jansa y Fiala -primer ministro polaco, esloveno y checo, respectivamente- declararon que Europa debe hacer algo para frenar la invasión rusa. Además, el viceprimer ministro de Polonia, Jaroslaw Kaczynski, instó a establecer una misión de paz en Ucrania. La propuesta contempla la posibilidad de desplegar fuerzas de la OTAN o de alguna organización internacional más amplia.
Esta fue la primera visita a la ciudad asediada desde el inicio del ataque ruso hace más de dos semanas. Los representantes europeos se reunieron con Zelinsky para expresarle el apoyo inequívoco de la Unión Europea. Aunque no participaron otros mandatarios ni funcionarios comunitarios, la iniciativa fue informada previamente al presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, y a la presidente de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.
Ambos marcaron que los riesgos de seguridad eran elevados. Un eventual ataque ruso contra la comitiva europea podría provocar una escalada del conflicto a nivel continental e incluso global. Dado que los tres países pertenecen a la OTAN, una situación semejante automáticamente hubiese arrastrado a la Alianza Atlántica al centro del conflicto.
La UE continúa apostando a la presión económica sobre Rusia. De hecho, en las últimas horas se aprobó el cuarto paquete de sanciones. De acuerdo con von der Leyen, estas medidas limitarán aún más el margen de maniobra de Putin. En Bruselas prevén continuar implementado sanciones hasta detener la invasión.