Luca Attanasio, embajador italiano de 43 años, un carabiniere, y el conductor de nacionalidad congoleña fueron asesinados en la República Democrática del Congo. El embajador Attanasio había iniciado su carrera diplomática en 2003 y en octubre de 2019 ascendió al cargo de embajador en Kinshasa. El ataque ocurrió cuando las víctimas se dirigían a visitar un proyecto del Programa Mundial de Alimentos al noreste del país, cerca de la ciudad de Goma.
Tanto el presidente italiano, Sergio Mattarella, como el ministro de Relaciones Exteriores, Luigi Di Maio, manifestaron sus condolencias. Asimismo, Di Maio aseguró que trabajará para esclarecer lo sucedido. Desde Bruselas, Josep Borrell y Charles Michel expresaron su preocupación y apoyo a las familias de las víctimas. Por su parte, el Gobierno congoleño ha acusado a las Fuerzas Democráticas de Liberación de Ruanda (FDLR) como responsables del ataque. A su vez, el ministerio del Interior informó que tres personas que integraban el convoy han sido secuestradas.
En las provincias orientales de la República Democrática del Congo el conflicto lleva más de 25 años e involucra a decenas de grupos armados. Además de las FDLR, también operan las Fuerzas Democráticas Aliadas, la Cooperativa para el Desarrollo del Congo, las milicias hutus Nyatura, Mai Mai, el M23 y el Estado Islámico en África Central. Solo en Kivu del Norte, Ituri y Kivu del Sur murieron más de 2.000 civiles en 2020. A la fecha, los desplazados por el conflicto ascienden a 5.2 millones.
El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) denunció el aumento de la violencia contra civiles desde el inicio de 2021. Antes del ataque al convoy del Programa Mundial de Alimentos, en enero fueron asesinados seis guardianes del Parque Nacional Virunga. Familias completas también fueron asesinadas; centros de salud y escuelas han sido saqueados; y aldeas enteras fueron incendiadas.