EE. UU. sancionó este lunes a 700 individuos, empresas y entidades iraníes, principalmente de energía, finanzas y transporte. Pero anunció que ocho países (China, India, Italia, Grecia, Japón, Corea del Sur, Taiwán y Turquía) estarán exentos de esas restricciones. Se trata de las ocho mayores naciones importadoras de petróleo crudo iraní, lo que limitará el efecto de las sanciones.
Las exenciones durarán seis meses para “garantizar un mercado petrolero bien abastecido”, dijo el secretario de Estado Mike Pompeo, aunque Washington aspira a reducir a “cero” los ingresos petroleros de Irán. La meta es continuar con la “presión económica» para forzar un nuevo pacto nuclear y atacar los vínculos de Irán con la organización chiita libanesa Hezbollah.
De esta forma, EE. UU. volvió a imponer las sanciones que había levantado tras la firma del acuerdo nuclear de julio de 2015 por Irán y el G5+1 (Rusia, China, el Reino Unido, Francia, Alemania y EE. UU). El presidente Trump decidió retirarse del acuerdo en mayo, por considerar que Irán no había cumplido su parte, lo que afectó severamente la economía y la moneda iraní.
Con información de: The New York Times.