El conflicto entre Rusia y Europa occidental (apoyada por Estados Unidos) a raíz del ataque al exespía ruso Sergei Skripal con gas nervioso no para de crecer.
Luego de la expulsión de decenas de diplomáticos rusos de distintos países europeos, el Kremlin asegura que Europa necesita “un gran enemigo» para justificar el enorme aumento de gasto que desde la Unión Europea buscarían impulsar en materia de seguridad.
Las palabras pertenecen al viceministro de Exteriores de Rusia, Alexander Grushko, quien además aseguró que «la llamada solidaridad europea es un paso que empeora considerablemente la situación en la esfera de la seguridad».
Con información de: Sputnik.