La llegada de Jair Bolsonaro al poder brasileño sin dudas traerá cambios en la región, más aún contando con el apoyo de Estados Unidos. Una de las cuestiones más delicadas de la política latinoamericana desde hace años es la compleja situación institucional de Venezuela, donde abundan las denuncias de violaciones a los derechos humanos y se vive una situación socio-económica devastadora para su pueblo.
Hasta el momento, el presidente argentino, Mauricio Macri, era quien lideraba la cruzada anti-Maduro, a través de las vías diplomáticas y los organismos internacionales. Pero ahora, Bolsonaro parece decidido a ir por más y hasta planteó la posibilidad de utilizar la fuerza si es necesario.
En esta línea, Bolsonaro se reunió con Mike Pompeo, el secretario de Estado de Estados Unidos, con el objetivo de comenzar a trabajar para “restaurar la gobernanza democrática y los derechos humanos” en Venezuela, según el mismo Pompeo afirmó tras el encuentro. Ambos dirigentes también plantearon la necesidad de abordar de manera similar la situación de Cuba y de Nicaragua.
Con información de: El Universal.