El Gobierno de Estados Unidos hizo oficial la autorización para que cuatro compañías estadounidenses hagan transacciones con la empresa estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA). Sin embargo, dejó en claro que la autorización tiene un carácter temporal.
Las empresas afectadas son Halliburton, Schlumberger Limited, Baker Hughes Holdings, y Weatherford International. La autorización tiene vigencia hasta el 19 de noviembre de este mes. Asimismo, se mantuvieron otras restricciones sobre la producción o comercialización de hidrocarburos por parte de Venezuela.
Según informó la Oficina de Control de Activos Extranjeros estadounidense, la autorización vinculada a PDVSA se justifica en la necesidad de mantener operaciones esenciales en Venezuela. También esgrimió como argumentos la terminación gradual de operaciones en Venezuela y la necesidad de «garantizar la seguridad del personal o la integridad de las operaciones y activos en Venezuela».
El organismo dejó en claro que se mantienen las prohibiciones para la participación en el diseño, la construcción, instalación, reparación o mejorías «de cualquier pozo u otras instalaciones o infraestructura en Venezuela, o la compra o provisión de cualesquiera bienes o servicios excepto los requeridos para la seguridad».