El presidente de Perú, Martín Vizcarra, planteó este domingo una “cuestión de confianza” al pleno del Congreso de la República, al que convocó a sesión extraordinaria en un mensaje televisado. Así, busca tratar la reforma constitucional y judicial que propuso hace 40 días, pero cuyo debate, dijo, fue “dilatando y desneutralizando” el Parlamento por ser de mayoría fujimorista.
Según la carta magna peruana, si pierde, censuran o le niegan esa confianza, el presidente tiene el derecho constitucional de disolver el Parlamento y convocar nuevas elecciones generales, ya que sería el segundo Gobierno vetado en un mismo periodo presidencial, luego de la censura hace un año del exmandatario Pedro Pablo Kuczynski.
La idea es que los congresistas voten con carácter de “cuestión de confianza” cuatro proyectos de ley que incluyen: la recomposición del Consejo Nacional de la Magistratura, manchado por casos de corrupción; la no reelección inmediata de los congresistas; la bicameralidad, mediante la restitución del Senado peruano (hoy no existe); y un nuevo sistema de financiación de la política.
Con información de: El País / BBC Mundo.