El sistema electoral estadounidense es tan particular que permitirá que hoy 538 compromisarios se reúnan hoy para votar a Donald Trump como presidente de Estados Unidos, a pesar de que Hillary Clinton obtuvo casi tres millones de votos más que el empresario. A pesar de la diferencia en el voto popular, Trump alcanzó 306 votos electorales, contra 232 de Clinton.
Aunque nunca en la historia un presidente con mayoría de votos electorales no fue elegido presidente, la personalidad de Trump despertó innumerable iniciativas para que los electores “voten a conciencia”, es decir, un pedido para que los electores republicanos no voten por Trump. Es cierto que a lo largo de la historia hay registro de varios electores que no votaron por el candidato de su partido, pero Clinton necesitaría que 36 de los electores de Trump voten por ella, algo que es inimaginable y que sin dudas sería una bomba aún más fuerte que el triunfo de Trump.
Superado este trámite, Donald Trump queda listo para recibir de manos de Barack Obama el poder el próximo 20 de enero.