El enfrentamiento entre el gobierno central español y la región de Cataluña sigue en aumento. Luego del referéndum secesionista realizado el domingo y la represión de las fuerzas policiales enviadas por el presidente, Mariano Rajoy, para impedirlo, cientos de miles de personas se manifestaban este martes en las calles de Barcelona en forma de protesta.
El reclamo se realiza en el marco de una huelga general, convocada por sindicatos, partidos políticos y organizaciones de la sociedad civil, donde los manifestantes -unos 300.000 según la policía municipal- marchaban en columnas. A su vez, en diferentes puntos de esta región de 7,5 millones de habitantes, se estaban realizando cortes de rutas.
Involucrado desde hace años en un conflicto creciente con el gobierno del conservador Mariano Rajoy, el ejecutivo catalán llevó a cabo el domingo una consulta sobre la independencia pese a la prohibición del Tribunal Constitucional. Los resultados fueron favorables a la independencia en más del 90 por ciento, con una participación superior al 42 por ciento.
En un intento de impedirlo, policías nacionales y guardias civiles recurrieron a distintas técnicas de represión –incluyendo balas de goma- contra manifestantes decididos a votar.