Keiko Fujimori, la principal dirigente opositora peruana e hija del expresidente del país, fue arrestada este miércoles como parte de una investigación de lavado de dinero. Se trata de una causa por haber aceptado contribuciones ilegales como fondos de campaña provenientes de la constructora brasileña Odebrecht durante sus candidaturas presidenciales en 2011.
La detención ocurre apenas días después de que la Justicia ordenara que Alberto Fujimori regresara a prisión para cumplir lo que resta de una sentencia por corrupción y delitos de lesa humanidad; esa decisión anuló un indulto humanitario que Pedro Pablo Kuczynski, el anterior presidente del país, le había extendido a Fujimori en diciembre.
El fiscal del caso consideró que Keiko Fujimori tenía riesgo de fuga y ordenó que fuera retenida por diez días mientras se analiza si imputarle cargos formales. En respuesta, la lideresa de Fuerza Popular publicó el miércoles una carta en su cuenta de Twitter en la que tilda el arresto de “persecución política”, mientras sus partidarios comenzaban a manifestarse públicamente.
Con información de: El País / The New York Times.