Una serie de atentados tuvo lugar en las últimas horas en distintos lugares del mundo.
En Turquía, un doble atentado se produjo en las afueras del estado del club de fútbol Besiktas, al finalizar el partido entre el local y el Bursapor. El resultado, 38 muertos y al menos 155 heridos. El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, afirmó que se trató de “un acto terrorista dirigido contra nuestras fuerzas de seguridad y los ciudadanos en Besiktas”, considerando que 27 de los fallecidos son policías. El gobierno turco no dudó en señalar que se trató de un acto terrorista, en el que se utilizaron dos coches bomba.
Por su parte, en El Cairo, Egipto, la explosión de una bomba en una iglesia cristiana copta de El Cairo dejó como resultado la muerte de 25 personas. Por el atentado resultaron heridas 49 personas también. El ataque, enmarcado en los constantes atentados perpetrados por insurgentes musulmanes en el país, es el más violento sufrido por la minoría cristiana copta.
Por último, en Somalia otro atentado produjo la muerte de al menos 20 personas en el puerto de su capital, Mogadiscio. La célula islamista Al Shabab, vinculada a Al Qaeda, que realiza atentados con cierta regularidad en el país, se hizo cargo del ataque
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