A pesar de haberla criticado fuertemente durante la campaña, durante una charla telefónica con el primer ministro italiano, Paolo Gentiloni, Trump confirmó su compromiso con la OTAN y aseguró que asistirá a la próxima cumbre de la organización, que se realizará en mayo en Italia.
Según indica un comunicado oficial del gobierno italiano, ambos mandatarios «reafirmaron el compromiso sin tregua en la lucha contra el terrorismo y el radicalismo y los esfuerzos por alcanzar una solución de la crisis en Ucrania, por la paz en Oriente Medio, en Siria y, especialmente, en el Norte de África».
Esta postura de Trump es un alivio para Europa, hasta ahora escéptica sobre el accionar del neoyorquino, y fortalece la unión entre Europa y Estados Unidos en la disputa del liderazgo mundial contra las grandes potencias del este, Rusia y China.