ZOOM INTERNACIONAL
    Twitter Instagram WhatsApp
    ZOOM INTERNACIONAL
    • AMÉRICA
    • EUROPA
    • MEDIO ORIENTE
    • ÁFRICA
    • ASIA/PACÍFICO
    • ENTREVISTAS
    • OPINIÓN
    • CONTACTO
    ZOOM INTERNACIONAL
    AMÉRICA

    El legado Obama II: un mundo aún más complejo que el que recibió

    17 enero, 2017
    Facebook Twitter LinkedIn WhatsApp
    Share
    Facebook Twitter WhatsApp Telegram

    Siendo Estados Unidos la mayor potencia mundial, su presidente siempre es una especie de presidente del mundo. Con las frustraciones de las guerras en Afganistán e Irak, y con el permanente recuerdo del fracaso en Vietnam, el presidente Obama decidió encarar una política exterior clara: no involucrar a Estados Unidos en cuestiones que no afectaran explícitamente sus intereses. De esta manera lograría concentrar recursos a nivel doméstico y no fastidiar a sus jefes, los ciudadanos estadounidenses, que cada vez más cuestionan la utilización de sus impuestos en intromisiones militares en terrenos distantes|.

    El legado Obama en esta materia es riquísimo y sin dudas será inolvidable. En Irak y Afganistán, no logró llevar a la práctica su deseo de retirar las tropas estadounidenses. Si bien lo puso en práctica, luego tuvo que aceptar que era necesario, por no decir imperioso, que la mayor potencia mundial mantuviera presencia en dos territorios que siguen siendo conflictivos y que se han transformado en el hábitat natural de Estado Islámico, su Al-Qaeda. A pesar de la captura y asesinato de Osama Bin Laden, Medio Oriente le tenía preparado un nuevo desafío, esta vez en Siria. El tambaleante régimen de Bashar Al-Asad hizo que Obama tuviera que poner en práctica su deseo de limitar las intervenciones militares a favor de la diplomacia, lo que bien le valió ser galardonado con el premio Nobel de la Paz. Estados Unidos se involucró de forma timorata en un conflicto ajeno que no podía desatender. Fue así como, fiel a su idea, Obama dejó a Estados Unidos casi al margen del conflicto más grave que tuvo el mundo en materia de geopolítica durante su mandato, lo que generó un vació que Rusia e Irán decidieron llenar. Hoy la guerra en Siria continua, aunque con un acuerdo de futura negociación cuya medalla se colgarán Rusia y Turquía, pero no Obama.

    Cuba fue sin duda uno de los mayores aportes de Obama como presidente del mundo. Decidió terminar con el congelamiento de las relaciones, al punto de que hoy una bandera estadounidense flamea en La Habana, en la embajada abierta meses atrás. Obama decidió normalizar las relaciones con Cuba, aprovechando la mayor apertura propuesta por Raúl Castro, aún a sabiendas de la poca gracia que esto le hacía a su recientemente fallecido hermano, Fidel. Fue así como Obama avisó al mundo que ya era momento de darle una oportunidad a Cuba. Y el mundo lo siguió. Europa no tardó en avanzar en negociaciones para flexibilizar las trabas en su vínculo con la isla. Sin embargo, Donald Trump ya avisó que exigirá más a Cuba que lo que ha acordado con Obama, y que si Castro no ofrece más garantías de su voluntad de flexibilizar su régimen, el legado Obama, una vez más, se verá truncado.

    El histórico acuerdo con Irán, que generó la cancelación de sus ambiciones nucleares a cambio del levantamiento de sanciones económicas, será otro gran hito. Como lo será la abstención de utilizar el poder de veto para evitar la condena de la ONU a los asentamientos israelíes. Obama prefirió mantener la coherencia de Estados Unidos sobre la teoría de los dos estados antes que favorecer a su histórico amigo en Medio Oriente.

    Rusia es un capítulo aparte. Nadie hubiera imaginado que justo luego de la gestión de un presidente pro diplomacia y que buscaba correr a Estados Unidos del papel de guardián del mundo, la relación Estados Unidos con Rusia escalaría a niveles de tensión máximos desde la finalización de la Guerra Fría. La cuestión de los ciberataques terminó evidenciando una disputa solapada, que ya venía gestándose. Rusia decidió ir por el espacio que Estados Unidos, bajo la lógica Obama, había dejado vacante. Putin no dudó en protagonizar el conflicto sirio, cuestionando los dobles estándares de un Estados Unidos que buscaba la paz pero que no se involucraba para lograrla. Obama decididamente perdió el partido contra Putin. El líder ruso lo hizo perder en las elecciones presidenciales y hoy es la figura más influyente de la política internacional. La reciente decisión de Obama de trasladar tropas a la frontera este de Polonia así lo demuestra.

    En su despedida, Barack Obama ve cómo sus ideales chocaron contra la realidad. Paradójicamente, justo él que quiso retirar a Estados Unidos de los conflictos mundiales, no pasó un solo día como presidente sin que Estados Unidos estuviera en guerra. Afganistán, Irak, y luego Siria. Toda una síntesis de sus ocho años como presidente del mundo.

    Share. Facebook Twitter WhatsApp Telegram

    Otras noticias

    Terremoto en Ecuador deja al menos 15 muertes

    Petro, cuestionado por su plan contra el narcotráfico

    Honduras rompería con Taiwán para acercarse a China

    Boric refresca el gabinete

    Acoso sexual: 300 alumnas denunciaron a maestros en México

    «Mochilazo» en Chile enfrenta a estudiantes con carabineros

    LA GUERRA EN NÚMEROS
    https://zoominternacional.com/wordpress/wp-content/uploads/2023/03/Ucrania_numeros_.mp4
    LA GUERRA EN FRASES
    https://zoominternacional.com/wordpress/wp-content/uploads/2023/03/Ucrania_frases_.mp4
    NEWSLETTER

    Suscríbete a nuestro newsletter

    info @ zoominternacional.com

    Twitter Instagram WhatsApp
    ZOOM INTERNACIONAL © 2023

    Escriba arriba y presione Enter +. Presione Esc para cancelar.