La situación de Venezuela hace que la próxima Cumbre de las Américas, evento de por sí muy relevante, cobre aún mayor notoriedad. Es que, si bien la formalidad indica que el presidente venezolano Nicolás Maduro debe ser invitado, como todos los otros mandatarios del continente, muchos de sus pares se planteen la posibilidad de dejarlo afuera de la convocatoria.
El presidente peruano cursó la invitación a su par venezolano, pero luego el Grupo de Lima (el grupo de países que conforman un bloque que hace seguimiento sobre la crisis venezolana) sugirió que ésta fuese retirada, por considerar a Maduro una presencia que “ya no es bienvenida”.
Desde Venezuela ya hicieron saber que lo propuesto por el Grupo de Lima es inaceptable y que nadie puede impedir que Maduro asista a la cumbre. La cumbre se realizará en Lima a mediados el 13 y 14 de abril, justo una semana antes de que Maduro intente renovar su mandato en una elección que para muchos está viciada de nulidad.
Con información de: La República (Perú) / Europapress.