El año en Venezuela comenzó con saqueos en supermercados de distintas ciudades y el anuncio del presidente Nicolás Maduro de una rebaja en los precios de los productos que allí se venden.
A través de la Superintedencia Nacional para la Defensa de los Derechos Socioeconómicos (SUNDDE), Maduro ordenó a casi treinta cadenas de supermercados bajar los precios de algunos productos de consumo, en un marco de inflación abismal y en creciente asenso. La medida de Maduro provocó que miles de personas se agolparan en los comercios, con el fin de asegurarse la obtención de productos básicos para la vida diaria, a un precio muy inferior al de hace algunos días atrás.
La situación derivó en saqueos y episodios de violencia, que motivaron la intervención de las fuerzas de seguridad. La oposición acusa a Maduro de “administrar” la miseria del pueblo, mientras que el presidente acusa a las empresas del rubro de remarcar los precios de manera injustificada. Lo cierto es que la situación humanitaria en Venezuela sigue siendo preocupante y lejos está de solucionarse.
Leer más: El Nacional / El Universal.