Una grave crisis diplomática se desató entre los gobiernos de Venezuela y Argentina. Diosdado Cabello, diputado nacional y segundo del partido gobernante, llamó “cobarde” al presidente argentino Mauricio Macri, y declaró “enemigo” de su país al embajador argentino en Caracas, Eduardo Porretti, a quien pidió que deje el país.
Esta reacción de Cabello está relacionada con la decisión de los cancilleres del Mercosur de bloquear el ingreso de la canciller Dalcy Rodríguez a la reunión que se realizó en Buenos Aires. Venezuela fue suspendida del bloque a principios de este mes por incumplir con la adecuación de alrededor de 200 normas.
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